“Si no actúas como piensas, terminarás pensando como actúas.” – Blaise Pascal
Erase una vez una águila que desde que nació, vivió en el rancho de una familia que vivía de sus gallinas. Solo a eso se dedicaban ellos. Esta águila se perdió de pequeño y nunca conoció a los de su especie. Ella convivía con puras gallinas. La águila un día volteo al cielo, y notaba como otra a veces usaban sus alas para volar por los aires. Al ver esto. ella intento abrir sus alas pero al hacer esto una gallina con un aletazo hizo que las bajara y le dijo “tú eres una gallina, si volar fuera tu destino hubieras nacido con ellas”.
Por si quieres más de la vida. Por si estás confundido sobre donde estás. Por si tienes un hambriento dormido. Permítete contestar estás preguntas:
¿Cuáles son mis metas de la vida?
¿Son mis metas o son las metas de alguien más y las hice mías?
¿Realmente quiero eso de la vida?
¿Hay algo que quiera más que lo que conteste previamente?
¿Me conozco a profundidad?
Si la respuesta es no, ¿cómo sé si realmente son mis metas?
La pregunta está en las respuestas. La intención de este blog es que cuestiones. Si te causa duda en tus creencias, este blog a triunfado. Si este blog confirma que realmente quieres lo que decías querer, este blog a triunfado. No hay correcto ni incorrecto.
Tomando en cuenta la frase con que iniciamos el blog y la historia del águila. Si te causó una duda en lo que realmente quieres, ¿tiene sentido mover un poco de dirección el timón o al menos soltar el ancla a replantear metas? Recuerda que si no actúas como piensas, terminarás pensando como actúas. Cuida tus sueños, quizá algún día los necesites.